Parece mentira que hayan pasado ya siete años desde que se lanzara la berlina tipo coupé de tamaño medio de BMW, pero así es, y justo este año se cierra el ciclo de la primera generación, que, eso sí, se había actualizado ligeramente en 2017.
Es difícil hacer previsiones de cuándo llegará, pero dado que el prototipo que se presentó en el Salón de Frankfurt de 2019 estaba ya muy avanzado y que las pruebas dinámicas en todo tipo de escenarios han sido constantes, es fácil que se presente este verano y llegue poco después a los concesionarios.
Las imágenes que ha adelantado BMW no son muy reveladoras de su imagen al portar las ahora tan de moda “pinturas de camuflaje”, pero la marca sí ha adelantado algunos datos interesantes.
Por ejemplo, que la nueva generación de la Serie 4 tendrá unos 6 centímetros menos de altura que la versión de cuatro puertas, lo que le permite bajar el centro de gravedad para mejorar las aptitudes dinámicas de este modelo. En este sentido, también se ha ensanchado ligeramente el eje trasero, que tiene ahora 23 milímetros más, y la suspensión ha ganado en rigidez.
Más potencia
Aunque todavía no se conoce la oferta mecánica de que dispondrá la gama, y dejando aparte al M4, cuyo desarrollo llegará más adelante, la versión más potente de la nueva Serie 4 será la M440i xDrive. La “M” que precede al 440i ya da pistas de su naturaleza, y estas son las características: motor de 6 cilindros, 374 caballos de potencia y adicionalmente un sistema Mild Hybrid de 48V que, además de aportar un extra de 11 caballos de manera puntual, reduce considerablemente el consumo y las emisiones.
Este motor irá ligado a una caja de cambios Steptronic Sport de 8 velocidades y se combinará con el sistema de tracción total xDrive. Para dar una respuesta más efectiva y deportiva, esta versión también contará con un diferencial electrónico en el eje trasero desarrollado por M Sport, que también se he encargado de potenciar el equipo de frenos.
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